Lucero Llanos, Guayaquil
P ara muchos de los seguidores del reality Combate, de RTS, el nombre de Bratt Murgueittio es sinónimo de ‘chico malo’. Pero el polémico excapitán del equipo azul de este programa de competencias, detrás de la pantalla ‘esconde’ un lado creativo y amante del arte.
En ese espacio, mostraba una imagen ruda y frontal. “Es cuestión de ver un poco más allá de las cosas. Las personas que me conocen se sorprenden”, admite el quiteño, quien considera que su sinceridad es la que muchas veces le trae problemas.
Pero el capitalino no es solo ‘combate’, también se dedica a la música y es un ‘chico fashion’ que hasta tiene su propia línea de ropa.
Bratt revela que incursionó en el mundo de la moda en 2010, por una casualidad. Creó un par de piezas para su banda, pero le salieron clientes ‘de una’. “Quería que una marca vistiera al grupo. Pero se complicaba mucho porque tenían demasiados parámetros y tampoco ofrecían lo que yo quería. Ni los estampados, ni la filosofía, ni el estilo. Por eso decidí hacer una camiseta y una gorra para la banda. Y como la publiqué en Twitter, salió un interesado y se vendió”, detalla el artista.
En su primera colección, que presentó hace unas semanas en un centro comercial del noroeste de Guayaquil, se destacan estrellas y cruces. También predominan los colores negro y rojo, así como dorados y neones.
“Para mí las estrellas son sueños; y las cruces, todo lo que te esfuerzas para que esa estrella brille. Esa es mi filosofía. Y siempre lleva el número siete porque ese es el número de Dios”, explica.
Aunque no es un diseñador profesional, él es quien propone las ideas. “Yo lo pienso, pero tengo una persona que lo dibuja y otra que lo confecciona. Pero básicamente son mis diseños”, aclara sobre sus prendas, que mezclan “el rock con lo fashion”.
QUIERE SACAR SU DISCO
Bratt canta desde que tenía 12 años y en la actualidad tiene una banda de pop rock llamada Brattband.
“Yo quiero ser músico”, indica el joven, quien comenta que en la televisión vio la oportunidad ideal para que el público lo conozca antes de lanzar su proyecto musical.
“Siempre quise entrar a la televisión o a un reality para darme a conocer más rápido”, añade. Aunque reconoce que por su imagen de ‘chico malo’ es el que tiene menos seguidores en redes. “Pero así es esto”, exclama.
Al momento, está produciendo un disco con su agrupación. “Gracias a Dios encontramos una productora que nos da el auspicio completo, con sala de ensayo, estudios”, acota. “No tengo una fecha exacta del lanzamiento, pero va a ser pronto. En seis meses, quizás”, sostiene.
Bratt define su estilo como una mezcla de pop rock con funk y electrónica. “Es muy comercial. Mi idea es que mi marca de ropa se pueda desfilar con mi música. Todo tiene una filosofía”, finaliza.
Para muchos de los seguidores del reality Combate, de RTS, el nombre de Bratt Murgueittio es sinónimo de ‘chico malo’. Pero el polémico excapitán del equipo azul de este programa de competencias, detrás de la pantalla ‘esconde’ un lado creativo y amante del arte.En ese espacio, mostraba una imagen ruda y frontal. “Es cuestión de ver un poco más allá de las cosas. Las personas que me conocen se sorprenden”, admite el quiteño, quien considera que su sinceridad es la que muchas veces le trae problemas.Pero el capitalino no es solo ‘combate’, también se dedica a la música y es un ‘chico fashion’ que hasta tiene su propia línea de ropa. Bratt revela que incursionó en el mundo de la moda en 2010, por una casualidad. Creó un par de piezas para su banda, pero le salieron clientes ‘de una’. “Quería que una marca vistiera al grupo. Pero se complicaba mucho porque tenían demasiados parámetros y tampoco ofrecían lo que yo quería. Ni los estampados, ni la filosofía, ni el estilo. Por eso decidí hacer una camiseta y una gorra para la banda. Y como la publiqué en Twitter, salió un interesado y se vendió”, detalla el artista.