Miley Cyrus lo hizo de nuevo. Sin pudor alguno, se despojó de toda su ropa y posó sensual y rebelde para la renombrada W Magazine. Sin embargo, estas fotos son diferentes de todas las anteriores: muestran a una Miley mucho más elegante y madura… es tal el cambio que nos atrevemos a decir que la artista de 21 años ¡luce irreconocible!Envuelta en una sábana blanca semitransparente, con el cabello largo y platinado, los brazos llenos de joyas, muy poco maquillaje y una mirada retadora, Miley engalanó la portada de la revista que también ha sido protagonizada por personalidades como Scarlett Johansson, Kate Moss y Cara Delevingne.El estilista Edward Enninful fue el encargado de mostrar a una Miley completamente transformada, con el cabello a la altura del cuello, un maquillaje muy discreto y prendas sofisticadas, pero reveladoras. Detrás de la lente se encontraron Mert Alas and Marcus Piggott, renombrados fotógrafos de moda célebres por haber retratado a Kate Moss para la portada de Playboy.La entrevista –que muestra, una vez más, el lado más desenfadado de Miley– fue realizada por Ronan Farrow, el célebre hijo de Woody Allen y Mia Farrow. “A la chica más mala de América no le importa lo que pienses de ella”, comienza.Más adelante en la entrevista, Miley admitió que su imagen rebelde es planeada, pero que su finalidad es retar los estándares de Hollywood y enviar un mensaje a las chicas. “Que se joda todo. No tienes que usar maquillaje, no tienes que tener cabello largo y rubio ni un par de tetas grandes”.
Miley Cyrus lo hizo de nuevo. Sin pudor alguno, se despojó de toda su ropa y posó sensual y rebelde para la renombrada W Magazine. Sin embargo, estas fotos son diferentes de todas las anteriores: muestran a una Miley mucho más elegante y madura… es tal el cambio que nos atrevemos a decir que la artista de 21 años ¡luce irreconocible!Envuelta en una sábana blanca semitransparente, con el cabello largo y platinado, los brazos llenos de joyas, muy poco maquillaje y una mirada retadora, Miley engalanó la portada de la revista que también ha sido protagonizada por personalidades como Scarlett Johansson, Kate Moss y Cara Delevingne.El estilista Edward Enninful fue el encargado de mostrar a una Miley completamente transformada, con el cabello a la altura del cuello, un maquillaje muy discreto y prendas sofisticadas, pero reveladoras. Detrás de la lente se encontraron Mert Alas and Marcus Piggott, renombrados fotógrafos de moda célebres por haber retratado a Kate Moss para la portada de Playboy.La entrevista –que muestra, una vez más, el lado más desenfadado de Miley– fue realizada por Ronan Farrow, el célebre hijo de Woody Allen y Mia Farrow. “A la chica más mala de América no le importa lo que pienses de ella”, comienza.Más adelante en la entrevista, Miley admitió que su imagen rebelde es planeada, pero que su finalidad es retar los estándares de Hollywood y enviar un mensaje a las chicas. “Que se joda todo. No tienes que usar maquillaje, no tienes que tener cabello largo y rubio ni un par de tetas grandes”.