La Organización Mundial de la Salud (OMS) decretó ayer una emergencia de salud pública de “alcance mundial” e instó a la comunidad internacional a movilizarse contra la epidemia de ébola en África.
El comité de urgencia de la OMS, que se reunió el miércoles y el jueves en Ginebra, “considera de forma unánime que se dan las condiciones” para declarar “una emergencia de salud pública de alcance mundial”, declaró la directora general de la organización, Margaret Chan.
La epidemia de ébola, que ha dejado desde principios de año al menos 931 muertos entre los más de 1.700 presuntos casos detectados, es la “más importante y la más severa” en cuatro décadas, subrayó Chan.
La OMS no decretó, sin embargo, la cuarentena en los países afectados -Guinea, Liberia, Sierra Leona y en menor medida Nigeria- para no agravar su situación económica, pero pidió importantes medidas de control.
Tras este anuncio, la Unión Europea calificó de riesgo “muy débil” la propagación del ébola en el continente europeo y subrayó que en el caso, “poco probable”, de que el virus alcance el continente europeo, están “preparados para hacerle frente”.
Recomendaciones
Keiji Fukuda, subdirector general de la OMS encargado de la epidemia, explicó que los afectados tienen que quedarse 30 días en cuarentena porque el tiempo de incubación del virus es de 21 días.
Las personas que estén en contacto con los enfermos -excepto el personal médico que tiene indumentaria protectora- no deben viajar, indicó Fukuda, quien pidió además que la tripulación de los vuelos comerciales reciba formación y material médico para protegerse y proteger a los pasajeros.
El virus se transmite por contacto directo con sangre, líquidos biológicos o tejidos de personas o animales infectados y provoca una fiebre caracterizada por hemorragias, vómitos y diarreas.