Autoridades antinarcóticos incineraron hoy 12.351 kilogramos de marihuana en el departamento paraguayo de Canindeyú, fronterizo con Brasil y considerado uno de los centros de mayor producción y tráfico de esa droga en Paraguay.En el interior de un pozo, cavado en la Tercera División de Caballería del Ejército, en la ciudad de Curuguaty, los agentes destruyeron la droga, incautada en los últimos años en el departamento, en el marco de 17 investigaciones judiciales que continúan abiertas.El fiscal de Canindeyú, Christian Roig, dijo a Efe que la de hoy es la mayor cantidad de marihuana quemada en Paraguay en los últimos años."Canindeyú es uno de los mayores centros de producción, la nueva meca del narcotráfico", aseguró.La marihuana incinerada podría haber alcanzado un valor de 600.000 dólares en Paraguay y de más del triple si hubiese llegado a Brasil, afirmó el fiscal.Tres de las doce toneladas quemadas fueron descubiertas el año pasado tras una investigación periodística de Pablo Medina, corresponsal en la zona asesinado poco tiempo después junto a su asistente, Antonia Almada.Por el crimen está imputado el exalcalde por el oficialista Partido Colorado Vilmar Acosta, considerado autor intelectual del asesinato y quien actualmente se encuentra prófugo.El diputado por el Partido Liberal Olimpio Rojas, de la comisión bicameral que investiga el asesinato de Medina y Almada, dijo a Efe que "existe un verdadero peligro" de que las drogas acumuladas en depósitos sean robadas, como ocurrió a mediados de enero en el departamento de Amambay.Paraguay es el principal productor de marihuana de Suramérica, con una producción estimada en unas 30.000 toneladas de droga en varias cosechas al año.Es considerado además un lugar de paso para elaborar cocaína a partir de la pasta base boliviana y enviarla a países fronterizos como Argentina y Brasil o a Europa.EFE
Autoridades antinarcóticos incineraron hoy 12.351 kilogramos de marihuana en el departamento paraguayo de Canindeyú, fronterizo con Brasil y considerado uno de los centros de mayor producción y tráfico de esa droga en Paraguay.En el interior de un pozo, cavado en la Tercera División de Caballería del Ejército, en la ciudad de Curuguaty, los agentes destruyeron la droga, incautada en los últimos años en el departamento, en el marco de 17 investigaciones judiciales que continúan abiertas.El fiscal de Canindeyú, Christian Roig, dijo a Efe que la de hoy es la mayor cantidad de marihuana quemada en Paraguay en los últimos años."Canindeyú es uno de los mayores centros de producción, la nueva meca del narcotráfico", aseguró.La marihuana incinerada podría haber alcanzado un valor de 600.000 dólares en Paraguay y de más del triple si hubiese llegado a Brasil, afirmó el fiscal.Tres de las doce toneladas quemadas fueron descubiertas el año pasado tras una investigación periodística de Pablo Medina, corresponsal en la zona asesinado poco tiempo después junto a su asistente, Antonia Almada.Por el crimen está imputado el exalcalde por el oficialista Partido Colorado Vilmar Acosta, considerado autor intelectual del asesinato y quien actualmente se encuentra prófugo.El diputado por el Partido Liberal Olimpio Rojas, de la comisión bicameral que investiga el asesinato de Medina y Almada, dijo a Efe que "existe un verdadero peligro" de que las drogas acumuladas en depósitos sean robadas, como ocurrió a mediados de enero en el departamento de Amambay.Paraguay es el principal productor de marihuana de Suramérica, con una producción estimada en unas 30.000 toneladas de droga en varias cosechas al año.Es considerado además un lugar de paso para elaborar cocaína a partir de la pasta base boliviana y enviarla a países fronterizos como Argentina y Brasil o a Europa.EFE