Bruce Jenner, ahora convertido en Caitlyn Jenner, contempló la posibilidad de quitarse la vida antes de someterse a su proceso de cambio de sexo para escapar de la tortura que suponía no poder ser quien realmente era.
“He atravesado algunos momentos muy oscuros. He estado en mi casa con una pistola en la mano pensando: ‘Vamos a terminar ahora mismo con todo esto, con todo el dolor y con todo el sufrimiento’. Era una tortura, y yo he tenido que soportarlo”, reveló la estrella en su nuevo programa de telerrealidad, ‘I Am Cait’.
Durante el episodio de estreno del reality se pudo presenciar el primer encuentro de Caitlyn con su madre, Esther (88), sus hermanas y su hija pequeña Kylie Jenner.
En dichas imágenes Esther es quien más se emocionó frente a las cámaras al reconocer que le llevará “un tiempo” acostumbrarse a referirse a la exdeportista como ‘ella’.
“Va a ser muy difícil para mí pensar en ti como en ‘ella’ y llamarte Caitlyn cuando quiera hablar contigo.
Te pareces mucho a alguien de mi familia y he estado intentando darme cuenta de quién. No es sencillo, no lo es. Pero tus valores van a ser siempre los mismos, Bruce seguirá estando ahí porque sigues teniendo la misma alma.
Quiero a Bruce y eso nunca va a cambiar. Va a llevar un poco de tiempo acostumbrarse a esto, pero quiero hacer lo que él necesite. Nuestro gran problema siempre ha sido que te sentías incómodo a mi lado, creo. Cuando nos veíamos era como si quisieras escapar de mí”, aseguró Esther en unas imágenes obtenidas por el periódico Daily Mirror.
Sin embargo, en ese mismo vídeo Caitlyn se apresura a tranquilizar a su madre asegurándole que ya no piensa seguir aislándose del mundo como había hecho hasta ahora.