
Lo que parecía ser un viernes de tranquilidad y armonía para los habitantes de la parroquia La Unión de Clementina, del cantón Babahoyo, se transformó en una noche de terror y sangre. Quienes se alistaban para disfrutar del fin de semana, al calor de los tragos, se quedaron con todas las ganas de hacerlo porque después que se armó una balacera todo mundo se encerró en sus viviendas.
Nadie quería dar explicaciones sobre un hecho de sangre que enlutó a dos familias fluminenses. Los lugareños solo revelaron que dos matones que recorrían en una moto las calles AbdónCalderón y Juan Chanalana abrieron fueron en contra de tres ciudadanos que caminaban en pleno centro de la localidad, cerca de las 21:00.
Por la forma como fueron asesinados, se cree que el doble crimen se debió a un ajuste de cuenta. Los asesinos se ensañaron contra un menor de 17 años (R.R.C.V), quien recibió cinco impactos de bala en su humanidad. Uno se alojó en la cabeza, otro en el cuello y tres en la espalda.
Cuando los agentes de Criminalística de la Policía Nacional llegaron a tomar procedimiento el difunto no estaba en la escena de sangre, ya que sus familiares lo trasladaron a su vivienda para velarlo momentáneamente.
Otras víctimas
La otra víctima fue Calixto Jonathan Hernández Chávez, de 23 años, quien falleció dentro de una ambulancia antes de llegar al hospital MartínIcaza de Babahoyo.
Según el médico legista Arnoldo Romero, el adulto presentaba dos impactos de bala en el tórax que comprometieron órganos vitales.
Mientras que otro de los baleados, Alfredo Raúl Arroyo Icaza, de 22 años, fue transferido a una clínica de Guayaquil tras recibir un impacto de bala. Hasta ayer la víctima estaba asilada en la casa de salud del puerto principal.
Al momento, la Policía de Los Ríos investiga este doble crimen. Los gendarmes revelaron que Alfredo Raúl Arroyo Icaza tiene antecedentes penales. El 11 de febrero del 2007 estuvo preso por tentativa de asesinato y el 28 de febrero del mismo año por robo en la provincia de Los Ríos. (GFR)