Frente al centro de salud Los Rosales, ubicado en sector del mismo nombre, un vehículo chocó a una motocicleta donde viajaba una pareja y su hijo de meses de nacido.
El resultado fue fatal, el jefe de hogar murió, la señora estaba herida, sin embargo, a pesar del violento suceso, el niño salió ileso. “La mano de Dios evitó que se murieran los tres”, dijeron los moradores.
La circulación fue suspendida en el carril central donde quedó el cuerpo de Rubén Darío Valdez Fortun, de 20 años, en tanto la madre y su bebé fueron conducidos a la casa de salud que estaba a menos de cuatro metros de donde sucedió el incidente.
A Diana Marisela Bautista Tipán le colocaron un cuello ortopédico, se le observó raspones en su cara y para descartar otras complicaciones la trasladaron al hospital Gustavo Domínguez.
De la criatura se encargó una enfermera. Ella también subió a la ambulancia y fueron al hospital para esperar a los familiares de la pareja accidentada.
El menor se veía asustado y lloraba, inocente al lamentable hecho se refugió en los brazos de la enfermera, quien amorosamente le golpeaba la espaldita y trataba de calmarlo.
PUDO SER PEOR
La vía donde pereció Rubén Darío es muy transitada. La Abraham Calazacón descongestiona el centro de la ciudad y el tráfico vehicular en ocasiones se torna pesado.
Los moradores dijeron que afortunadamente los vehículos lograron frenar de lo contrario la tragedia hubiese sido triple.
Los cuerpos de los esposos y el niño quedaron en la carretera. El bebé se salvó porque su madre lo tenía dentro de una cobija y eso amortiguó el golpe.
El carro que ocasionó el accidente desapareció. Los testigos dijeron que era un automóvil. La Policía no dio con el paradero del supuesto causante de esta nueva tragedia que deja a un hijo sin padre.