Con resguardo policial se cumplen los trabajos de construcción del nuevo centro carcelario en Cuenca, luego del enfrentamiento registrado ayer.La confrontación que dejó dos personas detenidas, policías y manifestantes golpeados, en Turi, se produjo porque decenas de moradores se oponen a que edifiquen el Centro de Rehabilitación Integral proyectado por la Municipalidad de Cuenca en coordinación con el Ministerio de Justicia.Como a las 09:40, reguardados por unos quinientos policías y cien militares ingresó la maquinaria para iniciar la obra.Todo parecía tranquilo hasta que en un helicóptero policial llegaron el gobernador Humberto Cordero, el alcalde Paúl Granda y el subsecretario Nacional del Centro de Privación de Libertad de Personas Adultas y Adolescentes en Conflicto con la Ley, Ricardo Morales.Los quejosos, con piedras y pañuelos blancos, fueron agrupándose con la intención de impedir que la maquinaria haga el movimiento de tierra en las catorce hectáreas dispuestas para la edificación del centro.Unas ciento cincuenta personas corrieron hasta la maquinaria y lanzaron piedras y ladrillos contra los operadores.Hombres y mujeres con niños en brazos y en sus espaldas gritaban: “queremos seguridad; no a la cárcel, queremos paz”.El personal policial intentó dialogar con los quejosos, pero de nada sirvió. Algunos de los manifestantes se tendieron en el piso para impedir el movimiento de las máquinas.El jefe de la subzona de Policía del Azuay, Lenin Bolaños, dispuso el desalojo de los manifestantes. DETENIDOSDetuvieron a dos de los líderes en medio de los gritos de seguidores y familiares que lanzaron golpes de puño contra los policías.Los gendarmes se defendieron con los escudos. Hubo empujones de parte y parte y varios cayeron al piso. El jefe policial Lenín Bolaños recibió un golpe en el labio inferior.Cerca del mediodía y con la presencia de más policías reiniciaron los trabajos preliminares.El personal policial se mantendrá en el sitio para precautelar la integridad de los trabajadores y del vecindario.La nueva cárcel tendrá un costo de treinta millones de dólares. Albergará a mil quinientos reclusos, entre hombres y mujeres.“El proyecto contempla manejo ambiental, arquitectónico y ambiental”, dijo el alcalde Paúl Granda.Además, habrá obras complementarias como mejoramiento de la vía de acceso, parques y áreas verdes, agregó Granda.El gobernador Humberto Cordero advirtió “que sobre los intereses particulares y personales está el interés colectivo” y que “si se oponen, pese al proceso de socialización, se aplicará la ley”. anotó.Los detenidos, según el fiscal provincial Lizandro Martínez, serían acusados de rebelión y violencia contra la Policía.
Con resguardo policial se cumplen los trabajos de construcción del nuevo centro carcelario en Cuenca, luego del enfrentamiento registrado ayer.La confrontación que dejó dos personas detenidas, policías y manifestantes golpeados, en Turi, se produjo porque decenas de moradores se oponen a que edifiquen el Centro de Rehabilitación Integral proyectado por la Municipalidad de Cuenca en coordinación con el Ministerio de Justicia.Como a las 09:40, reguardados por unos quinientos policías y cien militares ingresó la maquinaria para iniciar la obra.Todo parecía tranquilo hasta que en un helicóptero policial llegaron el gobernador Humberto Cordero, el alcalde Paúl Granda y el subsecretario Nacional del Centro de Privación de Libertad de Personas Adultas y Adolescentes en Conflicto con la Ley, Ricardo Morales.Los quejosos, con piedras y pañuelos blancos, fueron agrupándose con la intención de impedir que la maquinaria haga el movimiento de tierra en las catorce hectáreas dispuestas para la edificación del centro.Unas ciento cincuenta personas corrieron hasta la maquinaria y lanzaron piedras y ladrillos contra los operadores.Hombres y mujeres con niños en brazos y en sus espaldas gritaban: “queremos seguridad; no a la cárcel, queremos paz”.El personal policial intentó dialogar con los quejosos, pero de nada sirvió. Algunos de los manifestantes se tendieron en el piso para impedir el movimiento de las máquinas.El jefe de la subzona de Policía del Azuay, Lenin Bolaños, dispuso el desalojo de los manifestantes. DETENIDOSDetuvieron a dos de los líderes en medio de los gritos de seguidores y familiares que lanzaron golpes de puño contra los policías.Los gendarmes se defendieron con los escudos. Hubo empujones de parte y parte y varios cayeron al piso. El jefe policial Lenín Bolaños recibió un golpe en el labio inferior.Cerca del mediodía y con la presencia de más policías reiniciaron los trabajos preliminares.El personal policial se mantendrá en el sitio para precautelar la integridad de los trabajadores y del vecindario.La nueva cárcel tendrá un costo de treinta millones de dólares. Albergará a mil quinientos reclusos, entre hombres y mujeres.“El proyecto contempla manejo ambiental, arquitectónico y ambiental”, dijo el alcalde Paúl Granda.Además, habrá obras complementarias como mejoramiento de la vía de acceso, parques y áreas verdes, agregó Granda.El gobernador Humberto Cordero advirtió “que sobre los intereses particulares y personales está el interés colectivo” y que “si se oponen, pese al proceso de socialización, se aplicará la ley”. anotó.Los detenidos, según el fiscal provincial Lizandro Martínez, serían acusados de rebelión y violencia contra la Policía.