Hoy, Patricia Stefanía Pillasagua Villamar cumple un mes de sepultada. Ella junto a su pequeña hija, Naomi, desaparecieron la mañana del sábado 9 de junio en el norte de Guayaquil.
Al día siguiente la joven de 19 años fue hallada sin vida y flotando en el río Daule, frente a la parroquia Los Lojas, en el cantón homónimo al afluente.
En ese entonces la bebé tenía dos meses de nacida. Ahora, tres meses y medio. Quince días después el presidente de la república, Rafael Correa, solicitó a la Policía que investigue su desaparición, pero aún no fue ubicada.
En este caso, la ex mujer de Ronni Ruiz, quien es padre y esposo de las víctimas, fue detenida en el cantón Quinindé, en la provincia de Esmeraldas, para ser investigada.
La aprehendida fue identificada como Santa Margarita Aveiga Solórzano, de 33 años. A ella el juez Vigésimo Séptimo de Garantías Penales del Guayas, Christian Jurado, le dictó prisión preventiva.
Mantienen esperanzas
La noche del pasado lunes, los parientes de Pillasagua se reunieron en la vivienda de sus padres, en el bloque 10 de Bastión Popular. En el sitio montaron un pequeño altar y recordaron el mes que ella tiene de fallecida.
La víctima fue velada en la urbe porteña, pero sepultada en el recinto Santa Rosa, del cantón Jipijapa, en Manabí.
Verónica, una hermana de la fallecida, relató que “aún tenemos esperanzas de encontrar viva a Naomi. Queremos que la gente nos ayude a saber dónde está y quién la tiene”.
Patricia Pillasagua era la cuarta de siete hermanas y un hermano. La mañana de ayer, algunos se encontraron. Ellos relataron que perdieron el contacto con la víctima casi un mes antes que ocurra la desgracia que los enlutó y hace que vivan preocupados por Naomi.
En cambio, en otro lugar de la urbe, Ronni Ruiz señaló que “la Policía se encargó de las investigaciones. Ellos saben hacer su trabajo. Me dicen que tengo que esperar y he colaborado con lo que sé”.
Ruiz agregó que “este ha sido un mes bastante duro. Aún no supero lo que sucedió. Trato de pensar que ellas (las víctimas) están en un viaje y que pronto volverán. Me siento mal”.
El progenitor también comentó que Naomi es su primera hija y que no se explica cómo alguien pudo hacerle daño de esa manera, pues “no tenía enemigos”.
“Si alguien sabe dónde está mi bebé, que la entregue o ayude con información. A mi hija la pueden dejar en algún convento, en alguna iglesia o donde sea, pero avisen para recuperarla”, enfatizó Ruiz.
“Ya maté a tu mujer, Ahora te toca a ti”
Ruiz comentó que laboraba como agente de seguridad, pero no está bien para continuar con su trabajo. “Hasta que no tenga mi hija en mis brazos o me sienta mejor no trabajaré. Ya le pedí a mi jefe que me apoye”, expresó.
El hombre recordó que se conoció con la madre de su hija hace más de un año en una cangrejada y que el día del velorio recibió un mensaje con el siguiente texto: “Ya maté a tu mujer, ahora te toca a ti”.
“A mí me llegó ese mensaje. Está claro lo que pasó. Cuando yo la agarré y la abracé ella tenía sangre aún. Quien se la llevó la golpeó y la torturó y en la noche la botaron al agua. Yo nunca recibí algún informe de autopsia”, acotó Ruiz.
El afectado agregó que “sé cómo fue porque la cara (de Patricia) estaba reventada, tenía un garrotazo (en la cabeza), una mano fracturada y otro golpe (por la pierna) mostró y luego la tiraron al río. Quiero encontrarme con la persona que la mató para que me diga porqué lo hizo”.
“Queremos apoyo”
Los parientes de Patricia mencionaron que aún no reciben ayuda de alguna institución. “Vivimos cerca de una basurero (menos de 100 metros). Mi mamá trabaja pero no gana ni el sueldo básico. Todo se complica para nosotros”, acotó Verónica.
Quien desee ayudar a los parientes o colaborar con información sobre Naomi puede comunicarse a los siguientes números: 081574416, 095746235 y 095745994, de Ronni Ruiz, o 093804900 y 089760177, de la familia Pillasagua.