
Montecristi, Manabí
La tristeza y desesperación invaden a los miembros de las familias López-Castro y Solórzano-Morrillo, luego de la tragedia ocurrida el pasado fin de semana, cuando tres de sus parientes fueron asesinados la madrugada del sábado en una terminal de buses de Caracas.
Según la prensa venezolana, un sujeto discutió con una de las víctimas por un encendedor, por lo que abrió fuego contra ellos y otro ecuatoriano aún no identificado. Ellos murieron en el acto.
Otros cinco de sus parientes resultaron heridos y luchan por sus vidas en un hospital de Caracas. Ellos acudieron a la terminal para recibir a Lourdes Moreira, cuñada de los Solórzano-Morrillo, quien partió desde Junín a Caracas.
Los deudos de los fallecidos buscan unirse con el anhelo de que los restos mortales de sus seres queridos, quienes vivieron diez años en tierra llanera, sean repatriados lo más pronto posible a su natal Manabí.