México (EFE)El 53 período extraordinario de sesiones de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) arrancó ayer en la Ciudad de México con el caso de una presunta desaparición forzada ocurrida en Ecuador en 1995, para el cual la esposa de la víctima pidió “justicia”.“La herida la llevamos siempre, la sensibilidad la tenemos siempre, en todo momento de nuestra vida”, aseguró María Esther Gomero, esposa del peruano Jorge Vásquez Durand, desaparecido hace 21 años en el conflicto del Alto Cenepa entre Ecuador y Perú.Vásquez Durand, quien se dedicaba a la compra y venta de artesanías, desapareció el 30 de enero de 1995 en Huaquillas (en la frontera con Perú) tras haber comunicado a su esposa su preocupación por pasar su mercancía por la aduana.Testimonios indican que ese mismo día fue detenido por miembros del Servicio de Inteligencia de Ecuador.Otras informaciones apuntan a que fue visto a mediados de junio de 1995 en el cuartel militar Teniente Ortiz “en malas condiciones”, según los datos proporcionados por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) al presentar el caso ante la Corte IDH en 2015.La víctima narró que tras la desaparición de su esposo sufrió dificultades económicas y emocionales. “A mi hija -que tenía 11 años cuando se produjo el incidente- se le empezaron a caer los cabellos, hasta la fecha” y le tuvieron que recomendar tratamiento psicológico, relató.Una esperanzaGomero reconoció que se alegró cuando la Comisión de la Verdad, creada por Ecuador en 2007, dijo que estudiaría el caso, pero el informe final no reflejó avances y en él solo aparecía la documentación que ella había aportado.Además, cuando se publicó el documento, Gomero aseguró que “no hubo una llamada”, y se enteró de su existencia porque su hijo lo encontró por Internet.La esposa de Vásquez Durand detalló que Ecuador no se puso en contacto con ellos para ofrecerles una reparación hasta que la CIDH emitió su informe de fondo en 2015 respecto al caso.