El deporte no tiene barreras, en todas partes del mundo puede rodar el balón. Sea donde sea, el espíritu deportivo está vigente.
Lo mejor de todo es que el periodismo nos abre las puertas de todos los sectores.
Esta vez la cancha fue uno de los patios del Centro de Rehabilitación Social del Litoral, mejor conocida como “Peni”.
Con la participación de cuatro pabellones se jugó primer torneo de indor fútbol relámpago denominado “Amigos por siempre”.
Los detenidos del Centro de Rehabilitación Social de Varones de Guayaquil aprovecharon las pasadas fiestas julianas para compartir amenamente una jornada deportiva, donde prevaleció la entrega, ganas, deseo de triunfar con orden y disciplina, tendientes a confraternizar el buen vivir.
Los equipos participantes fueron Sol Naciente, 3 Bajo, 3 Alto y Samaritano, siendo el primero de los nombrados que se alzaron con el título luego de demostrar clase y categoría en el campo de juego.
En el primer encuentro Sol Naciente venció a Samaritano por 4-2. Mientras que 3 Alto superó a 3 Bajo en la tanda de los penaltis luego de que el cotejo finalizó empatado. En la final Sol Naciente se coronó campeón luego de derrotar a 3 Alto.
El deporte los une
Félix Padilla, Nixon Ortega, Javier Herrera Romero, Henry Monzón, Hólger Pacheco y Hugo Tamayo (ex jugador de fútbol de la academia Alfaro Moreno, Paladin’s y Everest) fueron los organizadores del evento, quienes no descuidaron ningún detalle para que la competencia tenga el éxito deseado.
Hólger Pacheco, de la Fundación Amazonas, indicó sentirse arrepentido de su mal paso, pero que todo está cambiando gracias al Señor. “Nos equivocamos y nuestro creador nos pone a prueba y una de ellas es el cambio y hoy demostramos que lo podemos hacer a punta de deporte”, indicó.
Henry Monzón, otro de los organizadores del torneo, agradeció la colaboración de gente que apoyó para la realización de estos primeros juegos. “Aquí hay cada historia y cada hecho, pero no puedes juzgarlo sino lo conoces, por lo tanto necesitamos este tipo de actividades para lograr la reinserción a la sociedad, donde nos pertenecemos. Creemos que estamos preparados para volver”, expresó.
El campeonato contó con la supervisión de Héctor Reyna Vivar, director de la penitenciaría; Paolo Cedeño Molina, coordinador de Educación; y Pedro López, director de la escuela.
Al final de la jornada deportiva se efectuó una pequeña fiesta con comida incluida, preparado por los mismos reclusos. (JR)