“¡Me das todo lo que tienes o te hundo el cuchillo”, fue la amenaza que recibió el taxista Ramón Chicaiza, de 60 años.Tales palabras lo dejaron frío al conductor, quien sintió que su vida pendía de un hilo y de reojo alcanzó a ver el filudo cuchillo hincándole a un costado de la espalda. Temió lo peor.Con voz apacible, el chofer le dijo al asaltante que tome el dinero de la gaveta. Además, entregó el celular y memoria de la radio.Luego que el bandido se bajó del taxi, el conductor hizo lo mismo y comunicó del asalto a un compañero que en ese instante pasó por el sitio.Aún nervioso, Chicaiza dio las características del ladrón a los agentes de la Unidad de Policía Comunitaria de la Che Guevara y en conjunto con los taxistas buscaron al sospechoso.A los pocos minutos lo localizaron escondido en unos escombros. El taxista lo identificó y de inmediato fue apresado.Mientras esperaba en el asiento posterior del patrullero, el detenido aceptó que cometió el delito porque su hija recién nacida está enferma.Los uniformados señalaron que no era la primera vez que Pedro Pablo Angulo, de 27 años, era investigado.
“¡Me das todo lo que tienes o te hundo el cuchillo”, fue la amenaza que recibió el taxista Ramón Chicaiza, de 60 años.Tales palabras lo dejaron frío al conductor, quien sintió que su vida pendía de un hilo y de reojo alcanzó a ver el filudo cuchillo hincándole a un costado de la espalda. Temió lo peor.Con voz apacible, el chofer le dijo al asaltante que tome el dinero de la gaveta. Además, entregó el celular y memoria de la radio.Luego que el bandido se bajó del taxi, el conductor hizo lo mismo y comunicó del asalto a un compañero que en ese instante pasó por el sitio.Aún nervioso, Chicaiza dio las características del ladrón a los agentes de la Unidad de Policía Comunitaria de la Che Guevara y en conjunto con los taxistas buscaron al sospechoso.A los pocos minutos lo localizaron escondido en unos escombros. El taxista lo identificó y de inmediato fue apresado.Mientras esperaba en el asiento posterior del patrullero, el detenido aceptó que cometió el delito porque su hija recién nacida está enferma.Los uniformados señalaron que no era la primera vez que Pedro Pablo Angulo, de 27 años, era investigado.