El Gobierno alemán se propone castigar la zoofilia, el sexo con animales, con multas de hasta 25.000 euros, independientemente de si las víctimas de esa práctica han sufrido o no lesiones.La nueva ley implicará la prohibición de las prácticas sexuales con animales, actualmente no tipificada como delito, según avanza en su edición de hoy el popular diario "Bild".De acuerdo con ese medio, la normativa está en proceso de discusión en la coalición de centroderecha de la canciller Angela Merkel y entrará en el trámite parlamentario en el curso del presente otoño.Se espera que se someta a la votación de ambas cámaras, baja alta (Bundestag y Bundesrat) antes de que acabe el año, de manera que podría entrar en vigor a principios de 2013.Actualmente en Alemania está prohibida la difusión y exhibición de imágenes de sexo con animales, pero no la práctica de la zoofilia en sí misma, a no ser que como producto de esa práctica se produzcan lesiones o incluso la muerte del animal.La ministra de Agricultura, Ilse Aigner, de la Unión Socialcristiana de Baviera (CSU), defiende ante el "Bild" el propósito de penalizar el bestialismo y recuerda que Alemania está entre los países modélicos en cuanto a protección de los animales.
El Gobierno alemán se propone castigar la zoofilia, el sexo con animales, con multas de hasta 25.000 euros, independientemente de si las víctimas de esa práctica han sufrido o no lesiones.La nueva ley implicará la prohibición de las prácticas sexuales con animales, actualmente no tipificada como delito, según avanza en su edición de hoy el popular diario "Bild".De acuerdo con ese medio, la normativa está en proceso de discusión en la coalición de centroderecha de la canciller Angela Merkel y entrará en el trámite parlamentario en el curso del presente otoño.Se espera que se someta a la votación de ambas cámaras, baja alta (Bundestag y Bundesrat) antes de que acabe el año, de manera que podría entrar en vigor a principios de 2013.Actualmente en Alemania está prohibida la difusión y exhibición de imágenes de sexo con animales, pero no la práctica de la zoofilia en sí misma, a no ser que como producto de esa práctica se produzcan lesiones o incluso la muerte del animal.La ministra de Agricultura, Ilse Aigner, de la Unión Socialcristiana de Baviera (CSU), defiende ante el "Bild" el propósito de penalizar el bestialismo y recuerda que Alemania está entre los países modélicos en cuanto a protección de los animales.