Luego del macabro hallazgo del cuerpo de Jorge Eduardo Montesdeoca Loor, de 74 años, arrojado en dos partes debajo de un puente del kilómetro 45 de la vía a Santa Elena, las tres detenidas: Jessenia Rogel (de 26 años), Laura Ramírez (de 25) y Leidy Rogel (de 20) contaron a las autoridades cómo cortaron al hombre y además su plan para salir del país.Según la fiscal Yanina Villagómez, la clave para la captura de las tres mujeres fueron las llamadas que ellas realizaron desde el celular de la víctima a sus parientes pidiendo sesenta mil dólares por su rescate. Con ese dinero planificaban huir posiblemente a Brasil.La autoridad señaló que Jessenia Rogel habría sido compañera de labores de Jorge Montesdeoca en uno de los cementerios de Guayaquil desde el 2008.Todo habría empezado a las 19:30 del pasado 12 de noviembre, tiempo precisado mediante los registros de la telefónica Claro. Jorge Montesdeoca habría realizado tres llamadas a Jessenia Rogel Luna, quien le devolvió una de ellas. Luego de ese diálogo, Montesdeoca salió de su casa en la ciudadela Los Ceibos, rumbo a un sector de la Perimetral donde las chicas bebían en casa de un pariente de Jessenia.Como Montesdeoca solo tomaba jugo, las féminas decidieron ir hasta la casa de Jessenia ubicada en Los Esteros. Ahí, según lo narrado por las mujeres a la fiscal, Rogel Luna, tras comprar más cerveza, sacó de su dormitorio un cable de luz para estrangular al septuagenario, luego habría procedido a parársele en el pecho y darle un contundente golpe en la cabeza con una botella.Al romperse el recipiente, Jessenia le habría hincado el cuello hasta cortarle las arterias mientras la sangre de la víctima le salpicaba el rostro a la descontrolada fémina. Luego, decidieron deshacerse del cuerpo. Para esto las sospechosas habrían salido a comprar cuatro cuchillos en el auto Chevrolet Aveo de la víctima, a un comercial situado en la avenida Domingo Comín.Tras partir la columna de la víctima golpeando el cuchillo con un sartén, metieron las partes en sacos de yute y fundas. Lissete Ramírez sería la encargada de manejar y abrir el maletero del auto para que las hermanas Rogel Luna colocaran el cuerpo.Las mujeres nunca se percataron que el auto tenía muy poca gasolina y según lo señalado a la Fiscalía, en su versión voluntaria, en el kilómetro 45 de la vía a la costa se les apagó el vehículo, muy cerca a un puente. Entonces optaron por botar las partes del cadáver debajo de este viaducto. Sin el cuerpo, empujaron el carro alrededor de un kilómetro hasta que pidieron ayuda. En vista de que ningún conductor en la oscura noche quiso detenerse para socorrer a las tres mujeres, hicieron una señal a dos patrulleros de la CTE que pasaban por el sitio.Las detenidas revelaron que uno de los patrulleros accedió a ayudarlas para conseguir gasolina. Esta versión, según la fiscal Villagómez, está por confirmarse. Lo cierto es que luego siguieron el viaje de regreso a la casa en Los Esteros.PLANIFICARON RESCATEEl 14 de noviembre, las tres mujeres fueron hasta la terminal terrestre, donde las hermanas Lady y Jessenia se embarcaron en un bus rumbo a la península de Santa Elena para corroborar si los restos fueron encontrados.Se bajaron un kilómetro antes y caminaron hacia el puente para verificar que el cadáver seguía ahí. Desde ese instante las féminas planearon llamar desde el celular de Jorge Montesdeoca a Jorge y Lucía, ambos parientes de la víctima. Ellas pedían sesenta mil dólares, dinero que sería utilizado para salir del país. La mayoría de las llamadas las hicieron desde la casa de Los Esteros.La fiscal Villagómez señaló que el proceso deberá seguir y que en las próximas horas se realizarán las pericias de Criminalística para comprobar si esta vivienda fue el escenario donde se cometió el asesinato.Al finalizar, la autoridad señaló que las tres mujeres no son universitarias. Lady es ama de casa, Jessenia laboró de auxiliar contable para una empresa, mientras que Laura trabajaba en un almacén de zapatos.
Luego del macabro hallazgo del cuerpo de Jorge Eduardo Montesdeoca Loor, de 74 años, arrojado en dos partes debajo de un puente del kilómetro 45 de la vía a Santa Elena, las tres detenidas: Jessenia Rogel (de 26 años), Laura Ramírez (de 25) y Leidy Rogel (de 20) contaron a las autoridades cómo cortaron al hombre y además su plan para salir del país.Según la fiscal Yanina Villagómez, la clave para la captura de las tres mujeres fueron las llamadas que ellas realizaron desde el celular de la víctima a sus parientes pidiendo sesenta mil dólares por su rescate. Con ese dinero planificaban huir posiblemente a Brasil.La autoridad señaló que Jessenia Rogel habría sido compañera de labores de Jorge Montesdeoca en uno de los cementerios de Guayaquil desde el 2008.Todo habría empezado a las 19:30 del pasado 12 de noviembre, tiempo precisado mediante los registros de la telefónica Claro. Jorge Montesdeoca habría realizado tres llamadas a Jessenia Rogel Luna, quien le devolvió una de ellas. Luego de ese diálogo, Montesdeoca salió de su casa en la ciudadela Los Ceibos, rumbo a un sector de la Perimetral donde las chicas bebían en casa de un pariente de Jessenia.Como Montesdeoca solo tomaba jugo, las féminas decidieron ir hasta la casa de Jessenia ubicada en Los Esteros. Ahí, según lo narrado por las mujeres a la fiscal, Rogel Luna, tras comprar más cerveza, sacó de su dormitorio un cable de luz para estrangular al septuagenario, luego habría procedido a parársele en el pecho y darle un contundente golpe en la cabeza con una botella.Al romperse el recipiente, Jessenia le habría hincado el cuello hasta cortarle las arterias mientras la sangre de la víctima le salpicaba el rostro a la descontrolada fémina. Luego, decidieron deshacerse del cuerpo. Para esto las sospechosas habrían salido a comprar cuatro cuchillos en el auto Chevrolet Aveo de la víctima, a un comercial situado en la avenida Domingo Comín.Tras partir la columna de la víctima golpeando el cuchillo con un sartén, metieron las partes en sacos de yute y fundas. Lissete Ramírez sería la encargada de manejar y abrir el maletero del auto para que las hermanas Rogel Luna colocaran el cuerpo.Las mujeres nunca se percataron que el auto tenía muy poca gasolina y según lo señalado a la Fiscalía, en su versión voluntaria, en el kilómetro 45 de la vía a la costa se les apagó el vehículo, muy cerca a un puente. Entonces optaron por botar las partes del cadáver debajo de este viaducto. Sin el cuerpo, empujaron el carro alrededor de un kilómetro hasta que pidieron ayuda. En vista de que ningún conductor en la oscura noche quiso detenerse para socorrer a las tres mujeres, hicieron una señal a dos patrulleros de la CTE que pasaban por el sitio.Las detenidas revelaron que uno de los patrulleros accedió a ayudarlas para conseguir gasolina. Esta versión, según la fiscal Villagómez, está por confirmarse. Lo cierto es que luego siguieron el viaje de regreso a la casa en Los Esteros.PLANIFICARON RESCATEEl 14 de noviembre, las tres mujeres fueron hasta la terminal terrestre, donde las hermanas Lady y Jessenia se embarcaron en un bus rumbo a la península de Santa Elena para corroborar si los restos fueron encontrados.Se bajaron un kilómetro antes y caminaron hacia el puente para verificar que el cadáver seguía ahí. Desde ese instante las féminas planearon llamar desde el celular de Jorge Montesdeoca a Jorge y Lucía, ambos parientes de la víctima. Ellas pedían sesenta mil dólares, dinero que sería utilizado para salir del país. La mayoría de las llamadas las hicieron desde la casa de Los Esteros.La fiscal Villagómez señaló que el proceso deberá seguir y que en las próximas horas se realizarán las pericias de Criminalística para comprobar si esta vivienda fue el escenario donde se cometió el asesinato.Al finalizar, la autoridad señaló que las tres mujeres no son universitarias. Lady es ama de casa, Jessenia laboró de auxiliar contable para una empresa, mientras que Laura trabajaba en un almacén de zapatos.