Aunque solo había recuperado su libertad en papeles, ayer Byron Velásquez Briones desbordaba felicidad. Y no era para menos. Estaba a pocos minutos de convertirse nuevamente en un ser libre como el viento.
Antes de lograr ese sueño debió pasar por la Fiscalía adjunta a la Policía Judicial del Guayas, para cumplir con una citación ordenada por el fiscal Julio Vacacela.
La diligencia no se efectuó y se postergó para otra fecha, a pedido del defensor de Velásquez, Hernán Ulloa, quien quería primero realizar todo el trámite para que su cliente recupere su tan ansiada libertad, concedida a través de un hábeas corpus por los jueces de la primera sala Civil del Guayas.
“Lagartija”, esposado y escoltado por un policía y una guía de la Penitenciaría, llegó aproximadamente a las 09:00, con un nuevo semblante.
Sonreía a cada instante, como si respirara en el ambiente el aire de la libertad.
Tras su llegada lo encaminaron donde el fiscal Vacacela. En ese despacho se abrió una indagación previa para investigar “los delitos de función que podrían haber cometido los miembros de la Policía Nacional”, señaló la autoridad.
El abogado Hernán Ulloa explicó que su defendido acudió a rendir una versión porque el fiscal está “iniciando un proceso por la detención ilegal de la que fue víctima”.
Añadió que “esto va a dejar un precedente muy importante en el país”.
Viajará para apoyar a Emelec
Byron Velásquez manifestó que por ahora lo que anhela es que lo esperen sus amigos de la Boca del Pozo y de la hinchada Durán 14.
Pese a lo ocurrido dijo que nunca dejará de ir a los estadios porque “a mí no me dejó preso mi Emelec, a mí me dejó preso la injusticia. Cogieron al primero que vieron por ahí y ese fue ‘Lagartija’”.
Añadió que estar detenido injustamente no se lo desea a nadie. “Estoy agradecido con la gente de la Penitenciaría del Litoral, pabellón Renacimiento, que me trató bien”.
Afirmó que lo primero que hará será ir a comprar un boleto para irse a Quito y ver jugar hoy al equipo de su sueño.
Y mientras continuaban las diligencias para su libertad, “Lagartija” fue trasladado nuevamente a la “Peni”.
A su paso muchas personas quisieron tomarse fotos con él, pues consideran que no ha matado a nadie y más bien, al parecer, es víctima de la injusticia.
“Contento”
“Lagartija” dijo sentirse contento y feliz. “Al fin se resolvió este caso, bueno, no se ha resuelto en su totalidad, pero por lo menos estoy en la calle, libre”.