Una verdadera final se jugó el día de ayer, en el coliseo Los Quitus, ubicado en el sector de La Vicentina.
Los colegios Andino y Mejía disputaron el primer puesto, sin embargo, antes del partido un despelote dio la pauta para que se creara caos a la entrada y salida de los alumnos, pues varios de los jóvenes se quedaron con las entradas, ya que no pudieron ingresar al coliseo porque se encontraba repleto.
Cuando finalizó el partido y a pesar de que el marcador superó los cuarenta puntos, dejando como ganador al colegio Andino (87-47), los puñetes de revancha no se hicieron esperar.
La “pica” que sintieron los estudiantes del Mejía no los dejó retirarse en paz, por lo que decidieron lanzarse de “quiños” contra los alumnos de la otra institución, quienes festejaban la victoria.
Piedras, palos y hasta escupitajos fueron las “herramientas” que utilizaron los estudiantes de estos dos planteles para armar una tremenda pelea afuera del coliseo.
Moradores del barrio, luego de estar presentes en el suceso, aseguraron que siempre se da lo mismo, pues cuando hay finales de básquet las autoridades de las instituciones no se encargan de tomar las debidas precauciones y ocurren conflictos entre los estudiantes.
Juan Rubio, exjugador de la selección del Andino, indicó que hace algún tiempo también fue víctima de un piedrazo en la cabeza y aún desconoce quién fue el causante del accidente.
Agregó, además, que los rectores e inspectores de los centros educativos deberían pedir refuerzo policial para este tipo de finales, pues “se ha convertido en tradición las “puñetizas” fuera de las canchas.
A pesar de que la Unidad Policial Comunitaria La Vicentina está junto al centro deportivo, los jóvenes no tuvieron temor y continuaron armando relajo.
Finalmente, sin dejar daños en las instalaciones, los estudiantes de ambos colegios se marcharon con sanciones impuestas por las mismas instituciones. (ER)