Padre, madre e hijo murieron en un espantoso accidente de tránsito en la vía a La Bramadora-El Carmen, sitio La Esperanza. Rescatar a los fallecidos tomó a la Policía y el Cuerpo de Bomberos casi tres horas.
Las víctimas fueron identificas como Ramón Arcadio Flores Vera, de 40 años; Santa Deicita Chila Piloso, de 42; y el hijo de la pareja, Washington Alfredo Flores Chila, de 20 años, quienes vivían entre el paso lateral y el sector Manabí Libre, en El Carmen.
A las 19:30 aproximadamente, la familia viajaba en una camioneta Datsun blanca, de placa PBT-291, con cajas de plátano de exportación. Se conoció que regresaban del sitio Mata Palo cuando se produjo el choque con otro automotor.
La mujer iba en la mitad, su esposo manejaba el automotor y el joven estaba a un costado, junto a la puerta. Los tres quedaron atrapados en la cabina y murieron instantáneamente.
Washington Flores quedó irreconocible, ya que parte del cráneo y la masa encefálica estaban esparcidos sobre el cadáver de su progenitora. Los esposos tenían cortes en la cara, fracturas en las piernas y traumas internos.
Las imágenes eran impactantes y dolorosas a la vez. Los agentes trataron de sacar los cuerpos, pero las latas impedían el trabajo, cada minuto que pasaba había más gente y era inevitable la conmoción.
“Nunca vi un accidente así”, comentaba Luis Arriaga, un campesino del sector que con asombró recorría la zona de desastre.
Decenas de cajas de plátano verde estaban regadas en el piso. Nadie se atrevió a tomar nada por respeto a la memoria de los fallecidos que eran conocidos de la zona. Los curiosos colaboraron y juntaron el producto en un rincón y lo taparon con saquillos. CHOQUE FRONTALDel informe policial se conoció que la camioneta donde fallecieron los tres integrantes de la familia Flores Chila chocó con otro vehículo de similares características.
Se trata de una Mazda, doble cabina, de placa JBC-162, color rojo, cuyo conductor fugó. Según el parte policial, este automotor supuestamente invadió el carril contrario y se estampó con la Datsun que iba en sentido opuesto lo que provocó la destrucción total de los carros y finalmente las camionetas quedaron incrustadas con las tres personas adentro. “ERA UNA EXPLOSIÓN”La multitud coincidía en haber escuchado una explosión. El golpe fue tan fuerte que la gente salió corriendo de sus casas pensando que una bomba detonó y que sus vidas corrían peligro. Al salir a la carretera se encontraron con el accidente de tránsito.