Por querer salvar la vida de su hijo Tito Ramiro Moreno Guano, de 35 años, se lanzó al río Yanayacu, afluente que nutre de agua a la parroquia Guasaganda, de La Maná, provincia de Cotopaxi, y terminaron ahogados la tarde del martes.
El padre y su hijo, Tito Joel Moreno Castellanos, de 13 años, salieron a trabajar a la finca, pero al llegar la noche y ver que no llegaba ni su marido ni su hijo, Benilda Castellanos avisó a su familia que vive en Guasaganda.
Manuel Moreno, padre del fallecido, junto a Teresa Medina, teniente político de esa localidad, y varios comuneros salieron en busca de los desaparecidos.
Eran la 13:00 cuando los cadáveres fueron encontrados. El menor estaba a 300 metros de donde había caído, mientras que Tito a 500 metros más abajo.
Freddy Moreno, hermano del fallecido, indicó que ellos nunca llegaron a laborar a la finca, por lo que e presume se ahogaron en la mañana del martes, al parecer el menor se resbaló al pasar por un improvisado puente de caña y se cayó, pero su padre al querer salvarlo se lanzó al río y no pudo rescatarlo, por lo que ambos se ahogaron.
NO TIENEN PARA LOS ATAÚDES
Tanto padre e hijo fueron llevados a una modesta casa de dos pisos en Guasaganda para ser velados. Los cadáveres estaban sobre una mesa cubiertos solo con unas sábanas y a lado unas velas, debido a la lejanía del cantón no pudieron comprar los ataúdes a tiempo, porque están incomunicados por la caída de un puente y deben hacer una travesía más larga por la parroquia El Carmen.
En un rincón lloraba desconsolada Benilda Castellanos, quien a pesar de perder a su marido y su hijo mayor se quedó con tres hijos, de 9, 6 y 2 años, ahora no sabe qué rumbo coger, ya que su esposo era quien la sustentaba. (YGV)