Esta vez la muerte “visitó” a Pasaje en la zona limítrofe con Azuay. Una explosión en el interior de una mina conocida como Virgen del Cisne, propiedad de Jaime Calva Jiménez, terminó con la vida de dos mineros que estaban por cumplir su tarea; el uno como barrenador y el otro como amallador. La fuerza del estallido los dejó destrozados.
El terrible hecho ocurrió ayer a las 07:00, cerca del sector La Playa, donde Édison Javier Moreno Chunzo, de 24 años, y su compañero Andrés Fernando Jaramillo Maldonado, de 22, después de colocar los explosivos y al tratar de salir, algo les impidió hacerlo con la rapidez que se requería y al darse la detonación algunas partes de sus cuerpos volaron por el aire, muriendo ambos al instante.
La tragedia estremeció al resto de obreros, quienes al escuchar el fuerte estruendo iniciaron la búsqueda de los restos, que fueron hallados dispersos dentro de la mina por rescatistas bomberiles de Pasaje, a donde también acudió el fiscal Marco Flores Calle, quien ordenó el levantamiento de los cadáveres.
ERAN DE AZUAY Y PASAJE
Édison Javier Moreno Chunzo, era de Santa Cecilia, Pucará, provincia del Azuay, lo conocían como “Gallito”, y vivía en el sitio Santa Cecilia, cerca de la hacienda La Maravilla, jurisdicción de Quera, Azuay, donde están ubicados los trabajos mineros.
Andrés Fernando Jaramillo Maldonado, de Pasaje, le decían “Suni” o “Chichobello” y estaba separado de su mujer.
Familiares de los dos fallecidos dijeron que el dueño de la mina, Jaime Calva, correrá con los gastos del sepelio. Los padres, quienes vivían del sustento de sus hijos, quedaron desamparados porque dependían de ellos y no estaban asegurados.
Esta anomalía, de la desprotección de decenas de trabajadores que se ocupan en labores de minería en condición de jornaleros, fue denunciada a la Policía Judicial, que por su parte iniciaron una investigación sobre el caso.
(MM)