El coronel de estado mayor, César Carrión, ex director del Hospital de Policía, quien forma parte de la lista de policías procesados y sentenciados por la revuelta policial del 30 de septiembre del 2010, aseguró que hasta el momento han pasado dos meses desde que la institución policial lo dio de baja, pero que aún sigue recibiendo su sueldo como coronel. “No entendemos qué es lo que pasa, tanto apuro para nada”, expresó.
El uniformado señaló que lo único que falta es la firma del primer mandatario para que se concrete definitivamente el cese de funciones y así comience a recibir su cesantía.
Carrión y su esposa, Janeth Orbe, dijeron que las supuestas persecuciones a su familia y “los constantes espionajes continúan” a pesar de que el proceso judicial y administrativo terminaron.
El oficial explicó que ahora “alguien no solo vigila la casa, sino que también se ha dedicado a hurgar en la basura. Hay un carro que pasa y retira las fundas de basura que salen de mi casa”, mencionó. (AA)