Un árbol torcido, un bus con el frente destrozado y un cabezal sobre el parterre dejó un choque registrado la mañana de ayer en el norte de Quito.
Eran aproximadamente las 06:15 cuando los moradores de las calles Tufiño y Real Audiencia escucharon un estruendo que los hizo levantarse de un solo salto de sus camas.
María Elena Araujo, cuya casa está ubicada junto al sitio del accidente, explicó que cuando se asomó para mirar lo que ocurría vieron un bus escolar prácticamente sobre el cabezal y a varios niños del colegio Manuela Cañizares llorando espantados por lo ocurrido.
Araujo manifestó que lo único que pudo hacer fue sujetar a los pequeños y contemplarlos para que se calmaran.
Algunos temblando y otros llorando aguardaron en el lugar hasta que sus padres fueran a retirarlos.
Afortunadamente los infantes no tenían golpes fuertes ni lesiones de consideración, sin embargo quien sí salió afectado fue el conductor del bus escolar.
“Estaba sangrando, parecía que se rompió la cabeza”, expresó la mujer.
El chofer del cabezal también terminó golpeado.
Accidente
Según un testigo, el cabezal subía desde la avenida La Prensa, por la calle Tufiño, cuando de repente el bus escolar que circulaba en sentido sur norte por la Real Audiencia se le fue encima.
“El chofer del cabezal para no interrumpir el paso de los otros carros se paró más adelante, en mitad del redondel, pero el bus le chocó”, comentó.
Se puso grave
Cuando la ambulancia llegó hasta el sitio para verificar a los afectados, los paramédicos empezaron a revisar a los niños, sin embargo se dieron cuenta que el conductor del bus comenzó a empeorar, “se puso pálido, los labios se volvieron morados y ya casi no respiraba”, comentó otro testigo del accidente.
Con este panorama los enfermeros decidieron llevarse al chofer hasta el hospital Eugenio Espejo, pues su cuadro se agravó.
¿O el semáforo o el redondel?
Mesías Gualoto, morador de la zona, explicó que los accidentes en esa parte del sector son muy frecuentes, pues los conductores o no miran el semáforo o no distinguen el redondel.
“No se sabe quién mismo debe pasar, el que entra primero al redondel o el que tiene la luz verde”, manifestó.
Según los moradores, a diario existen problemas por esta incomprensión, “solo desde que ocurrió el accidente unos tres o cuatro carros ya se salvaron de chocarse de manera similar”, afirmó Patricio Bravo.
Gualono propuso que la Policía decida si se quedan con la señal vertical o si de una vez por todas destruyen el redondel.