Horrorizada. Así estaba la población de Buena Fe, provincia de Los Ríos, la tarde de ayer, cuando un tipo degolló a su mujer y él también se hizo un profundo corte en la yugular. Ella murió, pero él quedó con vida.
En la morgue reposaba el cuerpo de Juana Alexandra Argandoña Navarrete, de 32 años, quien fue victimada por su exconviviente, Wilmer Sánchez, de 35 años. Además la señora recibió una puñalada en el tórax.
Janeth Chavarría, miembro de la junta cantonal, señaló que el crimen se dio a eso de las 13:00 cuando el exmarido fue a ver su examada para llevarla a almorzar. La sacó con engaños y se llevaron a su hijo de 2 años, luego al parecer la convenció y la trasladó hacia el río Gallina y en una finca le dio una puñalada en el abdomen y la degolló. La fémina murió a los pocos minutos.
Según Chavarría, se descubrió el asesinato cuando el niño salió por un maizal llorando ensangrentado y una mujer cogió al niño y fue con él al sitio de la muerte.
Al encontrar a la mujer sin vida, y como llevaba el uniforme del centro de integración para el buen vivir Soy Feliz, llamaron inmediatamente a dicha institución y luego a la Policía.
ÉL SE CORTÓ EL CUELLO
Luego de varios minutos Winter Cusme, quien cogía naranjas en la finca donde fue encontrada la mujer, escuchó a una persona que se quejaba y se dio cuenta que se trataba de un hombre que estaba degollado y agonizante.
El hombre fue llevado a una casa asistencial de Buena Fe, pero por la gravedad de la herida fue trasladado al hospital de Quevedo, donde hasta el cierre de esta edición permanecía con vida.
Según se conoció, la pareja deja huérfanos a tres niños, de 12, 10 y 2 años. Ellos estaban separados hace varios meses.
(YGV)