Los restos de Antonio Enrique Castro Quiroz, cabo segundo de la Policía, de 27 años de edad, fueron trasladados a su natal parroquia Venus, del cantón Quevedo, para su velación y entierro.
Con sus ojos rojos debido a tanto llorar por la muerte prematura de su hermano, RobertoCastro recordó que era un buen hombre dedicado a su familia y su trabajo. El familiar expresó que hace 15 días el agente fue transferido a la Unidad de Hidrocarburos de la Policía Judicial en Guayaquil y también estuvo en el cuartel Los Esteros, de esa ciudad.
Además comentó que su ñaño estuvo en la unidad zonal de Asuntos Internos en Quevedo por el lapso de 5 años.
El 15 de junio del 2011 recibió el ascenso de policía a cabo segundo e inició su vida policial en la escuela Las Peñas, de Babahoyo.
Antonio Castro falleció la mañana del jueves al ser impactado por un bus de la Metrovía, en Guayaquil, cuando circulaba junto al policía Segundo Suárez por la avenida Roberto Serrano.
Ambos gendarmes se dirigían al cuartel del Grupo de Intervención y Rescate (GIR) para rendir las pruebas físicas que se realizan una vez cada año.
Ernesto Castro, otro hermano del fallecido, dijo que cuando el bus tocó la moto, su consanguíneo cayó y se fracturó las piernas.
El agente deja huérfanos de padre a dos niños, uno de 10 años y otro de 8 meses, procreados con su esposa Juana Caiño, quien se dedica al comercio de ropa en Quevedo.
Hoy, a las 14:00, su cuerpo será sepultado en el cementerio Jardines de la Paz. (YGV)