Pasada las 09:30 de ayer, los restos del hijo del ex vicealcalde de Portoviejo, Julio César Sabando Córdova, fueron sepultados entre el llanto y dolor de sus familiares, amigos y conocidos, quienes clamaron por justicia y la máxima sanción para los asesinos.El ataúd estaba cubierto de plásticos debido al mal olor que este emanaba, ya que su cuerpo fue encontrado en completo estado de descomposición. Cientos de personas trasladaron los restos al cementerio general de la capital de los manabitas.El coronel Ramiro Mantilla, jefe de la zona 4 de la Policía Nacional, aclaró que el crimen se debió “a un presunto lío de faldas” y que faltarían por capturar dos o tres personas que participaron en este crimen, entre ellos “Maestro”, quien fue quien desembolsó los 8 mil dólares que se pagaron por la muerte del joven ingeniero civil de 23 años.Al momento existen cuatro personas detenidas en este caso: Gustavo Loor Carvajal, José Roldán Intriago, Eder Rivera González (de 56 años) y Luis Alfredo Lozano Donoso, de 35. Este último fue quien colaboró con la Policía e indicó donde habían dejado el cadáver, que fue encontrado enterrado a cinco metros de profundidad en una zona montañosa de la comunidad Las Palmeras de Río Bravo, cerca de la playa de San José, de Montecristi.Mantilla recalcó que el cuerpo tenía huellas de torturas. De este caso existen varios teléfonos celulares decomisados a los detenidos, donde se aprecia la planificación del rapto y crimen a través de mensajes de texto y llamadas.Identificado por sus zapatosEn rueda de prensa, la Policía señaló que la localización del cadáver se dio con la detención en la ciudad de Guayaquil, el jueves pasado, de Luis Alfredo Lozano Donoso y Eder Rivera González, quienes fueron contratados conjuntamente con otros sujetos para el trabajo ilícito.“Lozano Donoso fue quien, después de querer colaborar con la justicia, reveló con lujo de detalles el hecho delincuencial”, expresó el coronel Mantilla. Además, el detenido manifestó que ahorcaron a la víctima y luego la enterraron el mismo día de su rapto, y que fueron contratados por un sujeto que solo identificaban como el “Maestro”, quien les entregó los 8 mil dólares después del crimen. El cadáver estaba enterrado con piedras grandes y tenía las manos amarradas hacia atrás.Además, el oficial informó que se investiga si “Maestro” fue contratado por el autor intelectual del crimen para que busque personal para el trabajo ilícito, ya que quería saldar una cuenta pendiente porque Julio Sabando “presuntamente salía con la mujer de un señor adinerado de Portoviejo”.Los fiscales que estuvieron en el lugar del hallazgo fueron Alexandra Bravo, Luis Cadena y Marcelo Vásconez, con el apoyo de miembros del Grupo de Intervención y Rescate (GIR), Unidad Antisecuestro (Unase), Policía Judicial y familiares de la víctima.La fiscal provincial Sonia Barcia certificó que dos de los cuatro detenidos serían los autores materiales de este crimen. La segunda semana de la desaparición de Sabando Córdova fue arrestado un conocido abogado de Portoviejo junto a José Roldán Intriago.