Cuando hay esta clase de partidos eliminatorios los hinchas siempre quieren ser el centro de atención por los peinados de colores, sus cosas raras que llevan al estadio, caras o cuerpos pintados y máscaras, que por lo general llevan los colores de la selección.Antifaces DE LÁTEXA las 11:00, dos aficionados se paseaban puestos antifaces de dos personajes. A pesar del fuerte calor no se sacaron para nada y caminaron gritando por la selección nacional.Esas máscaras eran hechas de látex, un material que provoca sofocación al momento de respirar, y a esto se le suma el fuerte sol que hacía a esas horas en Quito.Luis Mora y su hijo Michael llegaron desde Canadá para mirar el partido de Ecuador. Ellos estaban vestidos con la camiseta tricolor, una mochila donde llevaban líquidos y en sus rostros los antifaces de Bin Laden y de un simio.“Quisimos hacer algo diferente, ver que algunos personajes de la pantalla chica como el simio (Planeta de los simios) y el terrorista Bin Laden ahora son ecuatorianos”, indicó Luis, quien además es hincha del Aucas.SOLO PARA EL PARTIDOPadre e hijos viven en Canadá y viajaron desde el norte del continente solo para apoyar a la selección en este partido de eliminatorias.“Nosotros vivimos allá, trabajo y estudio allá, pero solo vine para este partido de la selección. Llegamos hace dos días y ahora haremos fuerza por nuestra selección. Termina el encuentro y nos retornamos a Canadá”, señaló Bin Laden.HINCHAS BOLIVIANOSEn la capital están radicados alrededor de 400 bolivianos. Pero para este partido, durante las horas previas al encuentro, nos encontramos con Gilmer Velasco, de 62 años, procedente de La Paz, y su hijo Omar, quien viajó desde Chile, donde estudia un masterado en Economía.Ellos, vestidos con su camiseta boliviana, esperaban a su hija y hermana Susan Velasco, quien estudia en Quito y que realiza un postgrado en Comunicación Social.“Yo llamé a mi hijo y le expresé que vayamos a Ecuador a darle el regalo de cumpleaños a Susan. Este es el mejor presente para ella. Es la cuarta vez que vengo a Quito, una ciudad donde me siento como en casa”, indicó don Gilmer, abogado de profesión en su país.Al preguntarle sobre cómo adquirió las entradas, manifestó: “Bueno, no se me hizo difícil porque los jugadores de la selección me incitaron y me regalaron los boletos. Espero que el resultado sea a favor de mi selección y que nos llevemos bien durante el encuentro”, concluyó.