Cuando el hincha del fútbol habla, es claro, sin poses, no adorna nada y expresa las cosas de frente.
Los fanáticos “toreros” salieron del estadio Monumental viendo como Gremio le ganaba 0-1 a su querido Barcelona. El amargo sabor de la derrota estaba presente, pero a decir verdad, los seguidores del Ídolo piensan más en cómo lograr la corona 14 en el torneo nacional, que ser campeones de la Copa Sudamericana.
No es que le hagan “el feo” al certamen internacional, pero lo que en realidad es prioridad para sus seguidores es el título del campeonato ecuatoriano de fútbol.
Un paseo por la banca
Es verdad que el entrenador Gustavo Costas se equivocó al colocar algunos jugadores, que el colombiano Amaya no está pasando un buen momento, que su goleador Narciso Mina está en planes de divorcio con las redes y que el argentino Juan Carlos Ferreyra se “odia” con el gol. Todo esto es tan real, como que Navidad esta a tres meses.
Ante Gremio lo único que falto fue festejar el gol. La pelota pegó en el horizontal, luego lo hizo en el poste, también la sacaron de la raya y hasta el golero brasileño se la encontró en el camino.
El arco estaba cerrado y punto. Cuando pasa esto hay que analizar qué sucede en la cabeza de los jugadores.
Costas, quien no se casa con nadie y sueña con ganar la etapa en el torneo nacional para dar la vuelta olímpica, debería enviar a dos o tres jugadores -que no están viendo redonda a la pelota- a “un tour por la banca de suplentes”, para que sepan cómo es el sabor de las uñas cuando se está fuera de la cancha. Es la hora de cambiar a varios de quienes piensan que son los dueños de la plantilla titular.
Hay jugadores que -sin hablar- piden a gritos que los pongan en la banca de suplentes, así como otros que solicitan una oportunidad para ser titulares. Es la mejor manera para que quienes andan “de capa caída” regresen con ganas y con la puntería afilada. Claro que estas no serán “vacaciones”, porque el equipo los necesita, solo sería como un pequeño paseo.
Mina es el goleador del equipo, pero ante Gremio se “comió” tres festejos, que la hinchada ya celebraba. Pero los “artilleros” tienen partidos así.
Gremio se llevó los tres puntos de Guayaquil y sin todos sus titulares, aunque a ratos fue arrollado por el fútbol de Barcelona, que solo le faltó los goles.
El partido de vuelta será en Brasil... en el fútbol los resultados no están escritos.
Los “canarios” pueden clasificar, pero si es que el Ídolo no pasa a los cuartos de final de la Sudamericana, estamos más que seguros que los millones de hinchas “amarillos” tampoco se apenarán. Muchos festejarán porque el equipo tendrá solo un campo de batalla y objetivo: ganar la segunda etapa del campeonato nacional, para encontrar la famosa corona 14, que es en realidad lo que les quita el sueño.
¡Ojo Costas! En 4 partidos le han hecho 7 goles a Barcelona. 1 Independiente, 3 Cobreloa, 2 El Nacional y 1 Gremio.
¡Qué hinchada!
Los aplausos fueron de nuevo para la hinchada de Barcelona, vistió de amarillo al estadio Monumental, se dio el gusto de llenarlo.
El mal resultado en la Copa Sudamericana no lo mezclan con el torneo nacional, porque el domingo sigue el sueño en busca de la 14 frente a Independiente.
El estadio debe repletarse de nuevo, porque si la gente no va al Monumental, lo que se vivió el miércoles pasará solo como novelería.
Barcelona es la pasión de un pueblo, de fanáticos que sueñan ver a su equipo ganar siempre. Así es el fútbol: cuando se pierde, duele.
Este domingo continúa la historia del torneo nacional y la telenovela más exitosa del 2012: “Tras la corona 14”.