La muerte no permitió que Valeria Piedad Naranjo Tiluano, de 22 años, conozca a su hija recién nacida, pues tras el parto su estado de salud se agravó y falleció doce horas después, el pasado domingo, en Guayaquil.
Los familiares de la joven aseguraron que lo ocurrido fue producto de una supuesta negligencia médica y denunciaron el hecho en la Fiscalía anexa a la Policía Judicial (PJ), donde las autoridades lo calificaron como homicidio inintencional.
El hospital materno-infantil Matilde Hidalgo de Procel, también llamado maternidad del Guasmo, fue el lugar donde la víctima tuvo a su primogénita. Luego fue trasladada al hospital gineco-obstétrico Enrique Sotomayor, donde presuntamente llegó grave y falleció.
Según la documentación enviada a las dos casas de salud, firmada por el fiscal Robert Acosta, los centros asistenciales tienen 72 horas para entregar el listado de los médicos, anestesiólogos, enfermeros y auxiliares que laboraron el 27 de octubre desde las 12:00 hasta las 06:00 del día siguiente.
El caso será indagado por la Fiscalía Quinta de Personas y Garantías del Guayas y se inició la etapa de instrucción, por eso, según un vocero del hospital Sotomayor, ellos no pueden dar su versión “para evitar que se entorpezcan las investigaciones”.
En cambio, en la maternidad del Guasmo, los relacionistas públicos acotaron que elaborarían un informe para enviarlo a la ministra de Salud, Carina Vance, y luego informarían lo sucedido.
Denuncia
La noche del pasado domingo, Sofía Cárdenas, una hermana de la víctima, denunció en la Fiscalía que “el sábado 27 de octubre, aproximadamente a las 12:00, en compañía de mi cuñado Víctor Salazar, llevé a Valeria al hospital (maternidad del Guasmo) porque estaba en labores de parto”.
Además, “la doctora Cindy Wong, encargada del área de ginecología, la atendió y dispuso que le pongan un suero cerca de las 15:00, para que dilate (el útero) más rápido. Desde ese momento no recibimos más información de mi hermana, hasta las 21:00 que Wong entregó su guardia a la doctora Villacís”, precisó la pariente.
En el documento también consta que “a las 05:00 (del domingo) nos comunicaron que a mi hermana le hicieron una cesárea, que estaba bien y la bebé también. Posterior a eso un guardia nos dio una receta para que llevemos urgentemente un hilo para suturar”.
En consecuencia, “no habían farmacias abiertas en el Guasmo, fuimos a la 29 y Oriente y regresamos a la maternidad, pero nos informaron que mi hermana había sido trasladada al hospital Enrique Sotomayor”.
En el relato de Cárdenas también consta que “pedí información y la doctora Villacís me hizo salir. Luego nos trasladamos al Sotomayor, donde una enfermera nos manifestó que mi hermana estaba convulsionando, que llegó con los ojos vendados y ensangrentada en la herida donde le hicieron la cesárea”.
Según el escrito judicial, “Valeria fue llevada al hospital Luis Vernaza para que le realicen una tomografía y nos dijeron que tenía un edema en la cabeza. En la maternidad Sotomayor nos informaron que eso era porque a mi hermana le pusieron mucha anestesia”.
Víctor Salazar mencionó que su hija se llamará Nayeli Valeria y que su esposa será velada en los callejones Oriente y 27, en el suburbio de la urbe porteña.