Rosa María Valle Véliz, quien cumpliría 33 años este sábado, fue hallada sin vida el pasado 22 de noviembre en un ramal del estero Salado, en Guayaquil. Sus familiares no quisieron adelantar sospechas, pero algunos amigos de la víctima sí.
La mujer fue hallada en estado de descomposición y tras realizarle la autopsia los forenses comprobaron que fue estrangulada, según consta en el acta de defunción entregada a los parientes, en el departamento de Medicina Legal.
Además, la fallecida tenía alrededor de su cuello el objeto que utilizaron para matarla: una banda plástica de seguridad (usada para asegurar bultos, cables, etc.). También presentaba golpes en el cráneo.
El cadáver fue retirado del anfiteatro la tarde del pasado martes y sepultado media hora después, en un cementerio de la urbe porteña.
Desaparición
Según Georgina, una hermana de la víctima, el domingo 18 de noviembre, Rosa María y su conviviente Ángel Ubilla acudieron a su vivienda, en el suburbio, para organizar algunos objetos que ella recicló en los días anteriores.
Al siguiente día, “regresaron a las 15:00 para vender lo que ya habían dejado listo. Una hora después volvieron para acomodar otras cosas que les faltaban y a las 19:00 se fueron”, recordó la allegada.
Tres días después, “a eso de las 17:00, vino el marido a avisar que mi hermana no había ido a casa. Él me contó que ese día que salieron de aquí ella se puso molesta y se quedó con tres hombres. Él dice que se fue porque pensó que ella iba a ir, pero no lo hizo”, agregó la pariente.
La mujer, tras dialogar con un equipo de Diario EXTRA, mencionó que ella consideraba a la fallecida como su única hermana, “porque solo ella me visitaba. Solo ella se acordaba de mí”, sostuvo.
Datos
En lo que va del año, según datos de la Gobernación del Guayas, quince mujeres, incluida Valle, fueron víctimas de asesinato en Guayaquil, mientras que en el país, según los casos publicados por EXTRA, se contabilizaron 28.
Sospechas
Los familiares de la occisa no quieren culpar a nadie sobre su muerte. Comentaron que dejarán todo en manos de la justicia.
Amarilis León, amiga de Rosa, junto a otras vecinas, comentó que sospechan de una expareja de la víctima y señalaron que les pareció extraño que su actual conviviente preguntó por ella tres días después de su desaparición.
Las conocidas no identificaron a la expareja, pero León acotó que “hace quince días la apuñaló y a veces la maltrataba. Nosotras sabemos porque venía golpeada”.
La mujer mostró una fotografía en la que se observa a la víctima con uno de sus ojos hinchados.
En cambio, los familiares de su actual pareja, aseguraron que ella lo dejó antes de desaparecer. “Ella andaba con dos hombres y fumaba marihuana. Después de eso venía a maltratar a mi hermano”, sostuvo Nelly Ubilla, pariente del cónyuge.
Georgina respondió que “mi hermana no se drogaba ni era una mala mujer. Sí era brava, pero no es lo que ustedes dicen. Ella era humilde y se dedicaba a reciclar”.