Dos hermanos murieron a las 07:30 de ayer en un accidente de tránsito ocurrido en el kilómetro 24 de la vía a Quinindé, frente a la gasolinera Soria. Las víctimas, de nacionalidad colombiana, salían en su moto del recinto La Asunción, y al tomar la pista e intentar cruzar el carril contrario fueron embestidos por una camioneta Mazda BT-50, sin placa, que iba en sentido La Concordia-Santo Domingo.
El resultado fue fatal. El pasajero del pequeño vehículo cayó enseguida del impacto. El conductor logró mantenerse en el volante unos segundos, pero veinte metros más adelante se desplomó. Ambos murieron al instante y la moto fue devorada por el fuego. La alarma se encendió, ya que a pocos metros funciona una estación de combustible y una escuela con 200 estudiantes.
Los moradores salieron con baldes de agua y los choferes colaboraron con extintores y controlaron el flagelo.
Por los muchachos no había nada que hacer, la suerte estaba echada, un ataúd y un nicho los esperaban.
Judith Baños, conocida de las víctimas, los reconoció de inmediato. “Son los hermanos colombianos”, pronunció en cuanto se acercó a uno de ellos. El que estaba cerca de la moto no quiso ir a ver al otro, se lo veía tristeza en sus gestos.
La señora comentó que hace un año los veía constantemente en el sector y sabía que eran tres hermanos los que trabajaban en una plantación en La Asunción.
Luis Pilligua, otro lugareño, solo dio los nombres “el mayor es Luis y el chico es Ariel”, comentó.
A las 09:00, los cuerpos fueron trasladados a la morgue del Cementerio Central. Cerca del mediodía, una mujer que se identificó como prima de la esposa de una de las víctimas, confirmó que eran los hermanos Cortez, de Nariño, Colombia.
Rosa Martínez señaló que se enteró del accidente por la llamada de un compañero de los fallecidos y se acercó a la morgue para confirmar y avisar a los demás allegados.
La mujer dijo que era prima de la esposa de Luis Cortez, de 30 años. El colombiano estaba casado y vivía en Nariño, donde su mujer cuidaba a tres pequeños hijos.
Ariel tenía 17 años, ayudaba a su hermano mayor en los quehaceres del campo.
Los hermanos Cortez trabajaban en Ecuador y les iba bien. Cada dos o tres meses retornaban a su tierra llevando dólares y regresaban.
Estaban empleados en una florícola del recinto La Asunción, un caserío ubicado en el margen izquierdo, en el sentido La Concordia-Santo Domingo. Ayer, salían a realizar unas compras en la parroquia Valle Hermoso y murieron.