Tres son los huérfanos que deja Felipa Chacasaguay, de 30 años, después del fatídico accidente sucedido la madrugada de ayer, en el norte de Quito.
La víctima iba acompañada de su esposo Rosalino Roldán y su hijo mayor, de 10 años, quienes la llevaban a su lugar de trabajo.
Cuando se dirigían al Mercado Mayorista en su vehículo Megane, color plateado, una Ford Explorer azul chocó abruptamente al auto en el que se desplazaba la familia.
El incidente ocurrió en la avenida Seis de Diciembre y Capitán Ramón Borja, dejando una madre de familia muerta y tres personas heridas.
El cuerpo de la víctima fue trasladado a la morgue, en donde miembros de la iglesia cristiana Comité del Pueblo esperaban con tristeza y desconsuelo el cadáver de la señora.
Luego de la autopsia se determinó que las causas de su muerte fueron una laceración pulmonar, golpes en la cabeza y afectación en todos los órganos internos.
Sus amigos de la iglesia, los familiares tenían previsto llegar a Quito en las próximas horas para darle el último adiós, ya que era oriunda de Riobamba, en la provincia de Chimborazo.
Agregaron que desconocían como fue el impacto, pero comentaron que la noticia afectó a todos los hermanos de la comunidad y por eso se trasladaron de inmediato a reconocer a la difunta, mientras el esposo realizaba los respectivos trámites en la Fiscalía.
Dejó a sus tres hijos al cuidado de su padre, quien fue el menos afectado en el accidente, pero también tenía golpes en su cuerpo.
El niño sufrió varias heridas, por lo que fue trasladado a la sala de emergencias del hospital de niños Baca Ortiz.
Un miembro de la iglesia, quien se mantenía junto al menor de edad, aseguró que sus condiciones eran estables;añadió que sentía mucha pena por lo sucedido y que él y su congregación oraban para que este tormentoso incidente pase lo más pronto posible.
Según el sargento Eduardo López, se pasó la luz roja a exceso de velocidad lo que ocasionó el impacto.
En la Ford Explorer iban tres jóvenes, dos de los cuales escaparon del percance dejando a su amigo que conducía herido, quien fue llevado a una casa de salud con resguardo policial.
Los amigos de la iglesia esperan que los responsables de la muerte de su “hermana” paguen por el daño que causaron a tres niños y a una congregación.