La agarraron con “las manos en la masa” después de haber asesinado a su pareja.
En su vivienda, ubicada en el Girón de Chillogallo, Rubén Masabanda Laura, de 34 años, disfrutaba de una reunión con sus amigos.
Lo que parecía ser una noche de entretenimiento terminó siendo una velada de terror.
Luego de que se terminaran todo el trago que habían comprado, los jóvenes decidieron recostarse en los sillones de la sala para descansar, mientras que Rubén se fue a su dormitorio.
A las 03:00 de la madrugada, uno de los amigos de la víctima se despertó ante los gritos que venían del cuarto de la víctima.
De inmediato se dirigió al lugar del incidente y cuando abrió la puerta encontró supuestamente a la joven con un puñal ensangrentado en una de sus manos y a su amigo sin vida tendido sobre el piso.
Posteriormente al levantamiento del cadáver, la Policía procedió a tomar versiones de los hechos, en donde la joven afirmó que utilizó el arma blanca en defensa propia, ya que su pareja con la que convivía varios años la agredía física y verbalmente. (ER)