Freddy González vivió la experiencia más trágica de su vida. De casualidad pasaba por una de las vías sobre el estuario del río Esmeraldas cuando vio un accidente de tránsito. La curiosidad lo llevó a acercarse hasta el sitio del percance y al observar a la pasajera muerta dentro del taxi su corazón por poco se paraliza de la impresión. Era su mujer la víctima y el herido que llevaban en una ambulancia, su hijo, según dijo, pese a que no lleva su apellido.
Este fatal accidente ocurrió en las vías del sistema de puentes sobre el estuario del río Esmeraldas.
Como consecuencia del impacto del carro contra un poste, el conductor Marco Javier Tenorio Esterilla murió. La pasajera María Aveiga Molina, de 33 años, también falleció; y su hijo Cristhian Ortiz Aveiga resultó herido de gravedad.
Según la versión de los testigos, el taxi circulaba con sentido sur- norte. Al parecer el mal estado de los neumáticos sumado al exceso de velocidad y la calzada mojada hicieron que el conductor perdiera el control y el carro diera vueltas hasta impactarse de costado contra uno de los postes del sistema de vías.
Tenorio fue rescatado y llevado de urgencia a la clínica del IESS, donde falleció, mientras sus dos pasajeros permanecieron atrapados por varios minutos en el interior del vehículo, hasta que llegaron los bomberos con equipos especiales.
Freddy González, quien viajaba al centro de la ciudad en su motocicleta, se detuvo para conocer qué pasaba. Se acercó a ver el cuerpo de la fallecida y el horror recorrió su cuerpo al descubrir que se trataba de su esposa y que el herido que llevaban en la ambulancia era su hijo.
“Ella salió a hacer unas compras al centro comercial”, explicó el perturbado hombre al tiempo que preguntaba insistentemente a dónde llevaron a su hijo y qué trámites tenía que hacer para que le entreguen el cuerpo de María Aveiga.
En el sector son varios los accidentes que se produjeron, algunos con trágicas consecuencias. El lunes pasado el conductor Fabricio Cortez Salazar resultó afortunadamente ileso luego de caer a 40 metros de profundidad con su camioneta Nissan, placa PBU-5537, tres kilómetros del choque actual, en la carretera El Cabezón-Aire Libre.
En marzo del 2011 fallecieron Samuel Potosí, Juan Valencia, Leonardo Ayoví, Cindy Ortiz y herida Carmen Altafuya, al caer la camioneta en que viajaban de uno de los puentes de esta vía.
También murieron los policías Carlos Hidalgo Ruiz, Galo Castillo Llano, los esposos José Cabezas Bricio y María Figueroa Carrillo, por choques y embestidas de automotores.
El jefe de Tránsito, Fernando Basantes, explicó que los accidentes se deben a la impericia de los conductores e incremento de la velocidad que superan los 100 kilómetros por hora, cuando el máximo es 60.