“Un solo ídolo, tiene el Ecuador, Barcelona campeón… Barcelona campeón”. Así gritaban los hinchas del cuadro “canario” tras el triunfo que consiguió el elenco de Gustavo Costas tras superar por 2-0 al D. Quito con goles de Narciso Mina y Michael Arroyo que lo ponen cada vez más cerca del título.
Los primeros minutos de la etapa inicial fueron para el Quito que sometió al Ídolo en su propia cancha, con una recuperación del balón en el medio campo con Michel Castro y Fernando Saritama, quienes fueron un muro.
Pero de a poco los “chullas” empezaron a dejar espacios, los mismos que fueron aprovechados por el elenco “torero”, el cual se adelantó en el marcador a los 13 minutos.
CENTRO DE ARROYO
Después de un tiro de esquina llegó el primer gol del partido. Arroyo levantó un centro de manera magistral hasta el corazón del área.
En medio de empujones el delantero Narciso Mina se elevó y con tremendo golpe de cabeza venció al portero “chulla” Adrián Bone, quien se quedó estático mirando el balón inflar su portería.
Ese tanto fue festejado a todo pulmón por los jugadores “amarillos”, quienes fueron a abrazar a “Gambetita” por la gran jugada elaborada por la conquista.
En la etapa complementaria, el partido se tornó fuerte, ya que los dirigidos por Rubén Darío Insúa empezaron a cometer varias faltas.
Cerca de la media hora de juego el lateral Juan Carlos Paredes salió expulsado dejando a su equipo con diez hombres en la cancha.
El partido se tornó violento, ya que Santiago Morales estrelló un puntapié en el rostro del defensa “canario” Fricson Erazo, lo que generó una pelea en el campo de juego entre jugadores de ambos equipos. A Erazo le diagnosticaron una fisura en el ojo a la altura de la ceja.
Con diez menos, Barcelona se fue con todo a buscar un segundo gol para asegurar una victoria. Costas a falta de 5 minutos mandó a la cancha a Holger Matamoros para controlar el balón, pero los “toreros” querían un gol a como dé lugar.
LA CEREZA DEL PASTEL
Cuando se jugaban los últimos minutos del partido, Mina encaró un veloz contragolpe y cuando estaba a punto de rematar, Santiago Morales le cometió una falta lo que le costó la expulsión dejando a su equipo con nueve hombres.
El juez central Carlos Vera decretó el tiro libre y el que tomó el balón para cerrar una gran actuación en el partido fue Arroyo.
“Gambetita” se paró detrás del esférico, contó tres pasos y se dio media vuelta de cara al arco de Bone. Esperó la orden del juez y cuando escuchó el silbato sacó un disparo que superó la barrera, el cual se clavó en el fondo de la portería “chulla”. Un golazo.
Con ese tanto el partido terminó. Los hinchas “canarios” festejaron con los brazos en alto. Los jugadores en la cancha abrazados celebraban la victoria, ya que sacaron una gran ventaja para coronarse campeón nacional.
Jugadores no se sienten campeones
Redacción Quito
Al término del partido, los jugadores del Ídolo se abrazaron por la victoria alcanzada, pero todavía no se sienten campeones.
El “Ringo” Amaya dijo: “Gracias a Dios por todo esto. Me siento feliz. Vamos...vamos poco a poco rumbo al título. Todavía falta para celebrar a lo grande”.
Mientras que el marcador izquierdo Miguel Ibarra manifestó: “El triunfo con el Quito fue importante. Estoy contento con la victoria, por cuanto tapamos a los elementos desequilibrantes del Deportivo Quito. Por nuestra hinchada y familia estamos contentos”.
El arquero Máximo Banguera, quien le “salvó los muebles” al Ídolo, reveló: “Cerquita del objetivo, pero todavía falta mucho”. Finalmente, los integrantes del equipo “torero” pidieron a sus seguidores llenar el miércoles el Monumental en el cotejo ante Manta. (PLV)