“La seguridad primero, concéntrate en tu trabajo, ten cuidado”, dice en un letrero colocado en la puerta del edificio en construcción. Esa advertencia para que no sucedan percances trágicos dentro de la obra no fue suficiente para uno de los trabajadores, que la tarde del miércoles falleció por una violenta caída.
Entre las calles Gregorio Bobadilla y Luis Cadena, sector Altamira, en el norte de Quito, se construye el edificio Américas Parc, donde varios obreros de la construcción realizan distintos trabajos en cada uno de los pisos.
Pasadas las dos de la tarde, Luis Alberto Díaz, de 53 años, estuvo en el piso once desarmando la cabina principal de la grúa.
Por estar en lo más alto de la edificación, uno de los compañeros le advirtió que se coloque el arnés, ya que su vida corría peligro.
No pasaron muchos minutos, cuando aproximadamente a las 14:40 sufrió la caída fatal.
De las averiguaciones realizadas por la Policía a los compañeros de la víctima, Luis se sentó sin las debidas seguridades sobre un madero que no resistió su peso y se quebró.
CAYÓ POR EL DUCTO DEL ASCENSOR
El padre de familia se perdió por el ducto del ascensor y en cuestión de segundos su cuerpo cayó violentamente en el pavimento del subsuelo uno.
La precipitación causó la muerte inmediata del obrero. El paramédico del proyecto lo atendió de emergencia, pero nada pudo hacer porque al caer desde el nivel once, el cuerpo tuvo múltiples lesiones.
La Policía del sector fue informada de lo sucedido y al llegar e ingresar a la obra en construcción verificó el cadáver del infortunado trabajador.
Luis Alberto Díaz vivía en el Comité del Pueblo y desde hace 20 años estaba dedicado a trabajar como operador de la grúa en la empresa constructora.
Los familiares, que minutos después fueron informados de la lamentable noticia, llegaron al sitio para conocer las causas del accidente. (HA)