La Policía de Cuenca confiscó en cinco locales 762 joyas de todo tipo, con un peso de 2.969 gramos.
“Se trata de alhajas cuyos propietarios no pudieron justificar la procedencia ni su pertenencia, explicó Jaime Andrade, juez Regional de Contravenciones.
Andrade avalizó el operativo con las órdenes de allanamiento emitidas por el juez de Garantías Penales, Miguel Arias.
“En los locales intervenidos se recibe alhajas como garantía de préstamos usureros, con intereses altos y fuera de la ley”, sostuvo Andrade.
Los locales intervenidos son Joyería Danny, Joyería Rodríguez; La Perla compra y venta de joyas; Cuenca compra y venta de oro y Joyería Noriega.
Los negocios fueron clausurados temporalmente.
“Quienes se crean con derecho a reclamar los joyas confiscadas, deberán justificar su pertenencia con las facturas u otros documentos legales”, concluyó el Juez de Contravenciones.
Las alhajas fueron llevadas a las bodegas de la Policía Judicial.