El ruido de las maquinarias pesadas reemplazó, la mañana de ayer, el silencio sepulcral que había en la parroquia Tarqui desde que se dispuso culminar con las tareas de rescate de víctimas por el terremoto.
El corazón de Antonio Láinez Franco, de 64 años, le dice que su hija Mayra Juliana Láinez está viva bajo los escombros del centro comercial ‘Felipe Navarrete’, que colapsó el 16 de abril pasado y sepultó a más de un centenar de personas, 92 de ellas fallecidas.
Su esperanza de volver a ver el hermoso rostro de la joven, de 23 años, hizo que solicitara al Comité de Operaciones Emergente (COE) de Manabí que se reanudara la búsqueda entre los escombros.
La mañana de ayer, el padre de familia regresó al lugar, ubicado en pleno centro de Manta, y sus lágrimas mojaron la mascarilla que llevaba para protegerse del polvo y de los malos olores, que ahora están regados en el aire como ‘recuerdo’ de la desgracia que enlutó al cantón manabita.
El ‘Felipe Navarrete’, donde funcionaba una librería, papelería e incluso un hotel, es una de las edificaciones donde hubo la mayor cantidad de gente atrapada, entre ellos 31 sobrevivientes.
Pensaban que la habían rescatado
Antonio, quien llegó junto a autoridades civiles, militares y representantes de la Fiscalía, relató que su hija estaba recién egresada de la carrera de Ingeniería Civil y cinco días antes de la tragedia ingresó a laborar al centro comercial, al cual arribó también un grupo de antropólogos forenses extranjeros, para colaborar con la búsqueda.
El hombre agachó la cabeza y no pudo disimular el llanto al recordar que en primera instancia le informaron que “mi hija había sido sacada con vida al día siguiente del desastre. Desde entonces, la he buscado en hospitales, centros médicos y hasta en la morgue, pero su nombre no consta. Yo estoy seguro de que ella aún está con vida y por eso pedí que se reanudara la búsqueda en estos escombros”, expresó Láinez.
El ruido de las maquinarias alertó a los curiosos y peatones que circulaban por la avenida de la parroquia, donde hace dos semanas reinaba el silencio, que a su vez reemplazó a los gritos de los cientos de comerciantes que poblaban el sector ofreciendo sus productos.
Por esta fecha en Tarqui, miles de personas acudían a diario a sus calles, pues ese era el centro de venta de útiles escolares, uniformes y demás artículos para el inicio de clases.
Cada rugido de las palas mecánicas exaltaba al corazón de Antonio. “No siento muerta a mi hija, yo sé que está viva. La última vez que hablé con ella fue el viernes, un día antes de la desgracia”, señaló.
La fiscal Ginger Mesías confirmó que se reanudó la búsqueda en los escombros del centro comercial ‘Felipe Navarrete’ tras una inspección de los expertos del Cuerpo de Bomberos de Manta, quienes determinaron el ingreso de las maquinarias.
“Este procedimiento se volvió a dar después de que el papá de la chica informó al COE sobre la desaparición de su hija. Los familiares de la joven no habían hecho este procedimiento antes, porque se encontraban buscándola en otros hospitales del país”, dijo Mesías.
La funcionaria judicial aclaró que se reanuda la búsqueda en este lugar ante la denuncia de desaparición de Mayra Láinez, empleada del edificio destruido antes mencionado. Hasta el cierre de esta edición (17:00) continuaban removiendo escombros sin resultados.
Eduardo Almeida, director de Gestión de Riesgo de Manta, mencionó que “los espacios en las otras edificaciones caídas ya han sido ‘peinados’, y hasta el momento no se han presentado denuncias de desaparecidos, solo del señor Antonio Láinez. De presentarse otro caso similar, retomaremos de igual manera la búsqueda respectiva”, explicó.